Enviado a la página web de Redes Cristianas
A primera hora del viernes pasado, 9 de noviembre, partió de la Ciudad de México un contingente de la Caravana Migrante, para continuar en miles su caminar hacia el norte del continente, en busca de una vida mejor (o al menos de sobrevivir a la barbarie instalada en sus casas, sus patrias, sus cuerpos). Tras unos días de descanso y solidaridad en la capital del país, su éxodo continúa en medio del temor y la esperanza. Otros miles aún permanecen en Ciudad Deportiva y se espera que, en oleadas humanas, sigan llegando y saliendo los próximos días.