Enviado a la página web de Redes Cristianas
El cambio de la mentalidad predominante necesita mucho más tiempo que los cambios que pretende una agenda política.
Me parece incuestionable pese a que por cuestionar lo más sencillo, obvio y evidente nunca faltan voces estridentes en todas partes, que no tenemos más remedio que aguantar la política y a los políticos en un sistema estructuralmente injusto que prefiere la libertad, las libertades formales, las libertades políticas, de expresión, de manifestación, de circulación, etc, a la igualdad; igualdad que no significa identidad imposible sino aminoración de la desigualdad que pese a todo existe y siempre existirá en la naturaleza.